Peligra el Mobile World Congress de Barcelona: se irán si se consuma la deriva secesionista
Nunca había peligrado tanto la celebración del famoso Mobile World Congress (MWC) de Barcelona. La deriva nacionalista y sus constantes amenazas no parecen ser el caldo de cultivo idóneo para que se celebre un congreso de estas magnitudes, al que acuden casi 100.000 personas cada año y que deja un retorno económico estimado en 400 o 500 millones de euros. “De momento sigue en pie, pero no te voy a negar que estamos vigilando muy de cerca la situación y nada es descartable”, señalan fuentes próximas a la organización del popular evento a este periódico.
Y es que, visto los precedentes, los organizadores del MWC se pensarán dos veces la celebración del evento. Cataluña, ahora mismo, es un hervidero, y si ya en anteriores MWC se había aprovechado la situación para hacer apología independentista (o anti independentista), creen que este año se podría magnificar todavía más el debate en un evento que «nada tiene que ver con política».
Las fuentes consultadas no se posicionan al respecto ya que, insisten, no son una organización política. Pero recuerdan que no es de su agrado ver cómo por ejemplo Òmnium Cultural, plataforma que da apoyo al proyecto secesionista, se dedicara a explicar el derecho a decidir la independencia de Cataluña a los participantes del Mobile World Congress (MWC).
Su director y consejero delegado, John Hoffman, ya ha comenzado a trabajar en busca de ciudades alternativas a las que llevarse la feria de telefonía móvil más importante a nivel mundial.
Hoffman ya se enfadó, y mucho, con la huelga de Metro, que afectó de forma muy negativa al normal desarrollo del congreso celebrado el año pasado. De hecho, ni tan siquiera quiso participar en la inauguración del evento.
El consejero delegado de la gran asociación mundial de operadores móviles ya ha comenzado a buscar ciudades donde celebrar el encuentro, que considera que Barcelona había incurrido en incumplimiento de contrato, según explicaron a OKDIARO fuentes próximas a la organización del Mobile World Congress.
GSMA está barajando, de este modo, varias alternativas a Barcelona. Ya en el pasado, cuando estaba en el aire la renovación del contrato, sonó con fuerza Milán. Otra ciudad bien situada para ser la próxima sede del Congreso es la localidad turca de Estambul. Aquí en España, Cristina Cifuentes ya expresó en una entrevista dada a TVE que le gustaría que el Mobile World Congress se celebrara en un futuro en Madrid. La presidenta autonómica dijo: “Lo vamos a intentar dentro de unos años”.